viernes, 28 de mayo de 2010

El espejo y la madrastra

El día de su gran boda, la futura madrastra de Blancanieves mantiene una conversación con su mágico espejo.

-Buenos días espejo, hoy es mi gran día!! Voy a casarme con el hombre más honesto y poderoso de todo el reino. Estoy muy, pero que muy feliz, voy a es la mujer más afortunada del mundo ¿no te parece?

-Si, mi señora.

-Y la más rica.

-Si, mi señora.

-Y la más poderosa.

-Si, mi señora.

-Y la más hermosa.

-Umm.....

-¡Como que umm....! ¿No es verdad que soy la más hermosa y bella del reino?

-Umm….., bueno la segunda más bella si, mi señora.

-¡Como que la segunda! ¿Y quienes la primera?

-Pues…, veras…, es que…

-¡Quien! Vamos dilo, si no quieres que te rompa en mil pedazos.

-Blancanieves, mi señora, Blancanieves.

-¡Blancanieves¡ Umm…. Veré que puedo hacer con ella, no puedo dejar que me gane.

-Pero, mi señora, no le hará daño ¿no?

-No, digamos que se perderá por el bosque y que nunca más aparecerá.

-¿Cómo, mi señora?

-Pues muy fácil mi espejito, muy fácil: mandaré a uno de mis criados que la lleve al bosque y la mate. Y para asegurarme le diré que me traiga una prueba, jajaja…

-¡No, no, no puede hacerle eso a Blancanieves! ¡Pero si usted será su madrastra en unas pocas horas!

-¡¡Ah, no!! Pues espera y verás…jejeje…